El título que acompaña esta nota no es una frase abstracta, ni un idealismo etéreo y absurdo, es un axioma real para poder llegar a condiciones mínimas de convivencia. Entender la dimensión profunda de cada una de las palabras de esta, puede ser la clave para intentar ponerla en práctica.
Aquí no aplica el principio matemático de que el orden de los factores no altera el producto. La sociología no es una ciencia natural. Sin justicia no habrá paz, acá el orden de los procesos si es correlativo, uno obligatoriamente depende del otro.
La paz no es la ausencia de guerra o la violencia, tampoco es la tensa calma del miedo. La paz es una búsqueda constante por el bienestar de todos los ciudadanos en una sociedad. Es decir, el ideal supremo del bien común.
La justicia, en cambio, es una virtud cardinal, que se centra en el principio de darle a cada uno lo que corresponde, es decir, recibir o asumir la responsabilidad de los actos realizados o los delitos cometidos.
Para seguir leyendo... Clic.